Natalia Cepeda, Jefa Fundación Las Rosas en la Región de Coquimbo
Cada vez más las empresas de nuestra Región comienzan a percibir el tremendo aporte que representa para ellas seguir una causa social, que entregue más valor a su marca. Lejos de ser una moda, esto es hoy una
realidad que llegó para quedarse y por la que se están jugando miles de empresas, en el mundo entero. “Se trata de un escalón más dentro de la responsabilidad social empresarial que apunta ya no solo a cuidar el medioambiente o compensar los efectos de su intervención, sino también los impulsa a involucrarse y comprometerse de corazón con una causa social concreta, que haga sentido entre sus colaboradores, proveedores y clientes”, explica la nueva Jefa de Fundación Las Rosas en la Región de Coquimbo, Natalia Cepeda.
De hecho, según el estudio CHILE3D de GfK, realizado en 2019, un 56% de los chilenos cree que “las marcas tienen la obligación de involucrarse con causas sociales”, esto en línea con los informes que señalan que el 91% de los llamados milennials (25-39 años) estaría “dispuesto a cambiarse a una marca asociada con una causa”.
Fundación Las Rosas
En el caso de Fundación Las Rosas, tradicional institución benéfica que opera en el Hogar Visitación de María en La Serena, con 98 residentes, hombres y mujeres en su gran mayoría de nuestra región, su bandera son los adultos mayores. “La causa de una vejez digna, feliz y con sentido ha cobrado especial relevancia durante el último tiempo, lo cual ciertamente se traduce en una clara invitación a involucrarse con los valores y principios que representa nuestra Fundación”, explica Natalia Cepeda.
Ella agrega que los resultados vistos en aquellas empresas que se han aliado con Fundación Las Rosas apuntan precisamente a “beneficios en
posicionamiento, imagen, reconocimiento, fidelización o clima, lo que indiscutiblemente se traduce en rentabilidad”. Es más, dentro de la encuesta Cadem 2018, Fundación Las Rosas apareció como una de las 25 marcas ciudadanas más exitosas en Chile. “Esta causa es poderosa y estará en forma permanente en una sociedad como la nuestra, que envejece en forma acelerada. Necesitamos ocuparnos de los temas de la tercera y cuarta edad, especialmente de aquellos más desprotegidos, enfermos o solos que recurren a nosotros. Aquí las empresas tienen una gran oportunidad de
abrazar y apoyar a cientos personas mayores”, finaliza Cepeda.